y, como hacía tiempo que no preparaba ninguna tarta, pues me he puesto a ello
no me he complicado mucho, tenía una base de masa de galletas en el congelador y unas fresas en la nevera, así que sólo me faltaba el chocolate, porque para mí casi es un imprescindible en una tarta....
el resultado ha sido.....
la receta es tan simple que ni siquiera vale la pena contarla, pero por si alguien quiere saber más...
la base está hecha con una masa hecha con mantequilla fría cortada en dados mezclada con harina dos cucharadas de azúcar y una yema, todo esto lo trabajamos hasta que quede una masa, pero sin amasar mucho porque sino queda demasiado compacta. Lo ponemos en un molde untado con mantequilla y unos quince minutos al horno. Lo sacamos y cuando ya esté frío desmenuzamos todo el molde para que nos queden como migas de galletas. Lo ponemos en un bol y le añadimos 25 gramos de mantequilla fundida, se trabaja junto y se pone en un molde. Ya lo tenemos, evidentemente, te puedes saltar todos estos pasos y te vas directamente a deshacer un buen puñado de galletas y mezclarlas con la mantequilla.
el relleno es chocolate fundido con dos cucharadas de leche. Por otra parte mezclamos 125 grs. de mantequilla con dos cucharadas colmadas de azúcar glas y mezclamos, luego le añadimos dos yemas, volvemos a mezclar. Después el chocolate fundido (un poco frío) y las dos claras que nos quedan montadas a punto de nieve. Sólo queda ponerlo sobre la masa de galletas y dejarlo enfriar.
por último decoramos con las fresas fileteadas y con la nata montada. Y listo.
Bueno, pues eso, que ...¡¡¡¡¡¡FELIZ SAN VALENTIN!!!!!
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